Si te gusta la piel de gallina, asegúrate de visitar el único museo de los vampiros del mundo, Le Musée des Vampires, escondido en las afueras de París en Francia. Su espeluznante colección que incluye gatos momificados y ‘kits de protección antivampiro’ te pondrá los pelos de punta.
El museo de los vampiros y monstres de l’Imaginaire está escondido en un oscuro y dudoso callejón cerca de Porte des Lilas, en el borde de la ciudad, lejos de los lugares turísticos típicos. Eso es porque este no es tu museo habitual. Es una espeluznante colección privada que solo se abre al público más atrevido cuando hay una gran demanda.
Una excentricidad que oculta París con el museo de los vampiros
El museo de los vampiros fue establecido por Jacques Sirgent, un erudito excéntrico pero muy conocedor y especialista de lo macabro, que investiga el vampirismo, el esoterismo y el folkor occidental. Él es también el mayor punto de venta de un viaje.
El museo no está abierto al público y hay que hacer citas para visitarlo, pero una vez que consigues organizar un viaje, el propio Sirgent será tu guía (y habla un inglés impecable, ya que es profesor de inglés y traductor de Bram Stoker). Día – ¡así que es útil!). Te hablará sobre la historia de París, los cementerios donde se practicaron los rituales vampíricos y un sinfín de cuentos legendarios de espeluznante y hechos históricos.
Además, la pantalla es fascinante; un genuino kit de asesinatos de vampiros del siglo XIX, objetos coleccionables de Hammer Film, juguetes de Drácula, libros antiguos, un gran jardín interior de estilo gótico y todo tipo de rarezas e intrigantes fragmentos obtenidos en línea, en los mercadillos de Montreuil o en los cementerios.
Una atracción y una pasión por la cultura vampírica
El propietario del museo de los vampiros es un autoproclamado “vampirólogo” que se conoce con el nombre de Jacques Sirgent. Durante el día, él trabaja como profesor de inglés y traductor de Bram Stoker, pero la noche es cuando su verdadera pasión cobra vida. Es un erudito experto en todas las cosas vampíricas, un verdadero conocedor cuyo conocimiento sobre el tema es difícil de rivalizar.
A lo largo de los años, ha estado acaparando apasionadamente los objetos más espeluznantes, adquiridos de segunda mano por el propio hombre a partir de una serie de misteriosas fuentes. Estas fuentes tienden a ser los alcances más profundos de la web en línea, aunque algunos artículos han sido negociados en los mercados de pulgas de Montreuil, mientras que otros incluso han sido capturados en los cementerios.
Hoy, estos peculiares tesoros se exhiben en una habitación apretada. La pantalla se despliega en un jardín de estilo gótico que te permite recuperar el aliento después del terror de la visita. Aunque el diseño imita a un cementerio, entonces hay un pequeño respiro allí.
La colección
La entrada al museo de los vampiros es a través de un pequeño patio que se encuentra en la parte trasera de una residencia privada. La sala principal, que está abierta al público, alberga una fascinante colección de artículos relacionados con vampiros.
Hay pinturas, montones de libros, carteles de películas, accesorios de Halloween, objetos espeluznantes de bellas artes, etcétera. Incluso puedes encontrar un gato momificado que se encontró en el cementerio de Père Lachaise. El museo también tiene una colección de autógrafos de todos los actores de Hollywood que han protagonizado a Drácula.
Monsieur Sirgent será su anfitrión y le mostrará todo, explicando la historia de los vampiros, los orígenes del folclore y el lugar de los vampiros en la historia de Francia. Es claramente un experto en vampiros y ha escrito muchos libros sobre vampiros. Sirgent ha dedicado su vida a recopilar, traducir y recopilar datos sincréticos sobre la demonología y los dogmas relacionados con ella.
También es un narrador fascinante que puede extrapolar las historias sobre las misteriosas reliquias presentes en el Museo de los Vampiros. Te sorprenderá saber la críptica historia de la ciudad de París y los cementerios donde se realizaron rituales vampíricos.
